El Prat.

Planea el avión sobre el vacío.

Aterriza, sobre el otro vacío después.

Yo, por mi parte,

yo

planeo cómo romper la relación.
Planeo cómo no romperme.

Y me sale en la ecuación que,
una de dos.
O ella, o yo.

Sobre el otro vacío, planeo, y planea este vuelo.

El amor siempre me está haciendo perder
la paciencia
la memoria
la esperanza y
el tiempo

las cuatro juntas
a la vez
o lo que es lo mismo:

que yo,
yo
me pierdo

lo hago
cada vez que regreso a este vacío
de esta ciudad cruel medio fantasma
adonde
un día no sé muy bien por qué
emigré

y es desde entonces que yo no encuentro
ni el camino, ni el abrazo, ni las ganas
ni el motivo, ni la dirección, ni pertenencia
ni mi pasado, ni un futuro (que me llame), ni calma,
ni el olvido

ni las llaves.





Por faltar.




Te hiciste fuerte
desde lugares internos que tú no conocías.

Te reconociste
sostenidx en ciertas formas propias.
Justo en aquellas
que tú menos esperabas obtener.

Te descubriste
haciendo
exactamente
lo que había que hacer.
Pero tú no lo sabías.

Digamos que
te sorprendiste de ti, y
bueno,
pues que lo viste, y que subiste la apuesta.

Hizo falta casi de todo
para que hoy estuvieras.
Aquí.

Ahora ya sólo faltaría
que le quitases el factor sorpresa.

Falta. Qué falta.
Por faltar.
Falta

que te (lo) creas.

Berlín.



Eres las calles oscuras de Berlín
mis calles, que ahora me van contigo, por dentro
y yo no quiero que enciendan las farolas
y yo no quiero que te acabes


Y tengo dos, tres, quince voces
algunas me dan miedo
algunas me dan miedo que te den miedo a ti
miedo a perderte
aún peor: miedo a la pérdida inocua y sutil

y yo me quedo con una de todas ellas
me quedo con ella que es la que me dice que me quede
me quiero quedar y me quiero quedar conmigo

Quizás todo es para decirte que

no me voy,
que he pensado y que estoy aquí
que estoy en esto

que transitar es un verbo conocido y
que he pensado y que he decidido que me lo puedo permitir

que a ratos disfruto y a ratos aprendo
entre tus besos y también echándoles de menos

que no quiero encender las farolas
ni soltarte la mano
que quiero recorrer la vida que me corre entre tus piernas y que caminemos
porque en realidad no importan tantas cosas
y lo que importa, en realidad me importa tanto...

lo que importa, en realidad me importa tanto

que lo he pensado y he decidido
que aquí y ahora
yo me quedo
contigo
a descubrir qué se encuentra detrás
de todo este miedo que ya no compro
y que ya no vendo.



Acogida.




Las veo reír
en un momento fortuito, cualquiera
así, como muy de repente

después de haber escapado de la muerte
de la tortura
de una casa del terror en llamas
hay quienes de ellas que lo llamaron marido
compañero
algunas hablan de proyecto de vida
a veces tiene de nombre es lo que había que hacer
otras lo llamaron familia


las veo reír
después de las pastillas de la noche
antes de las de la mañana
más tarde de la sopa de dormir
más pronto del café de despertar


me pregunto,
con qué palabra se nombra esto
esto que escucho, que se rían tan bonito y tan sincero
como se llama eso de oír sus risas y saber que sí,
que esto no son mecanismos, ni evitaciones, ni síntomas del trauma
que esas risas que escucho
son reales
y yo me pregunto, si existe una palabra
que defina
este sonido


igual no, e igual no hace falta, y sólo soy yo
tratando de entender
necesitando rescatar
lo que siento al
presenciar tal acontecimiento


igual sólo soy yo
que quisiera agarrar con mis propias manos
la fuerza que sale de sus vientres
cuando vibran de risa
el destello que sale de sus ojos
cuando se miran y reconocen
cómplices en haber logrado salir vivas
del infierno por excelencia
más humano de todos


si pudiera agarrarlo, creedme
que yo lo cogería y no lo dejaría escapar
nunca
y se lo daría de beber a sus hijxs
confundidxs, dañadxs y asustadxs
y yo mismx lo bebería cada día
pensando
pensando que si esa fuerza de sus vientres cuando ríen y vibran
si esa fuerza sin palabras ni explicación clínica
tuviera nombre y materia
os juro
yo os juro que este puto mundo se salva
este mundo como sus hogares en llamas
se salva como se salvaron ellas.