Hospital Clinic.



Te dedico, Hospital Clinic
una poesía simple
una poesía
más simple que corta

te dedico las dos tetas que no me voy a quitar
te dedico la intervención que te vas a ahorrar
(o que gastarás en otras más disfóricas tetas)

te dedico la salita de espera
te dedico la cirugía el formulario
y te dedico
el quirófano, y te dedico la anestesia

te dedico el pre, el post,
el propiooperatorio
te dedico los puntos las curas los dolores la rehabilitación la baja médica que nunca tendremos
la gente que seguimos sin contrato

y te dedico el espejo:
sobretodo, yo, lo que te dedico es el espejo.

Te dedico mi no, gracias.

Te dedico las tetas que no me voy a quitar.
Te dedico este pequeño gesto de libertad
que he decidido que me voy a permitir.

Te dedico todas mis extrañas decisiones.
Piénsalo.
Es una buena ocasión para dedicarte algo.

Hospital Clinic,
sé que así funcionan las cosas para ti
y sé que por mi propio bien tú lo has intentado.

Así que, aquí nos despedimos,
liberal y abierto Hospital Clinic
tú, yo, el “que pase el siguiente” y mis trentaiún veranos

alterando el Natural Orden sagrado
de las cosas.